Educación
Sabido es que la Universidad proporciona una sólida formación del estudiante en aspectos tales como el económico, empresarial y financiero. Pero hoy en día, en un escenario de globalización de los mercados, los riesgos van tomando cada vez más importancia y ya no nos podemos conformar con abordar aspectos clásicos de la economía y de la empresa sino que nuestro horizonte debe ser más amplio y en consecuencia la formación financiera y actuarial debe tener un mayor peso específico.
Desde los acuerdos de Basilea y los tratados de Solvencia II, etc. nos vemos en la necesidad de abordar un mayor volumen de información y de datos y además en un escenario de riesgo permanente. Todo ello tiene que ser analizado para obtener los hechos más relevantes. La formación del actuario tiene que ser competente como para sintetizarlos y sacar las conclusiones necesarias de forma eficiente y sostenible.
Este es el reto al que debe responder la formación académica del actuario, en su nueva formación de Grado en Finanzas y Seguros, el cual debería ser completado con una formación posterior de tipo profesional. Para lograr este objetivo contamos con una referencia especial, como es el plan de formación o "Core Syllabus" del Grupo Consultivo Europeo, Asociación que agrupa al conjunto de países de la Unión Europea y que ha desarrollado este plan de formación integral fundamental del actuario, acorde con los principios del Espacio Europeo de Educación Superior.
